miércoles, 15 de septiembre de 2010

Capitulo 4

-Wow, creo que al dueño de esto le dará un ataque cuando vea como quedo por la mañana – comenté al ver la gran cantidad de botellas y vasos tirados en el suelo.
-Si, a mi papá – dijo observando todo alrededor.
-Esto es tuyo – dije un poco sorprendida al ver la pequeña laguna.
- De mi familia- me sonrió.

No dije nada. Camine hasta el borde de la lagunilla, y me senté. Iván se acostó a mi lado mirando las estrellas.

-¿Por qué te cambiaste de instituto? – preguntó de repente.
- Porque no encajé, y supongo que papá tiene la convicción de que si me cambia de institutos por fin encontraré un lugar para mí.
-¿Te trataban mal?
- No – reí amargamente – sólo me ignoraban, y era genial ser invisible, pero mi padre no piensa igual, quería que tuviera amigos, saliera el fin de semana, cosas así.
-Y… ¿sientes que encajas ahora?
-No lo sé – me acosté y miré la luna que estaba imponente y llenísima.

Nos quedamos un largo rato en silencio, miré a Iván y me estaba observando con una sonrisa pintada en su rostro.

-¿Estás drogado o algo? – pregunté al ver su cara. Soltó una fuerte carcajada.
-Yo no soy el vicioso acá – siguió riéndose.
-Entonces ¿Por qué me miras así?
-Por nada, sólo pensaba que eres rara.
-Oh, gracias – sonreí y volví a mirar la luna.
-No lo digo de una mala forma – se corrigió- es sólo que no eres como las demás chicas, y eso es simplemente genial.
-Supongo que tengo complejo de chico – me reí y él volvió a soltar una de sus carcajadas contagiosas.
- Drogado – negué con la cabeza como si lo desaprobara.

Me dedicó una mirada intensa, y acarició mi mejilla con su mano. Se acercó peligrosamente a mí, tal y como lo había hecho mientras bailábamos, no supe que hacer, deseaba con todo mi corazón probar sus labios pero…

-No quiero ser una más para tu colección de la noche – dije sentándome nuevamente.
- ¿Enserio crees que eso serías para mí? – dijo sentándose también y mirando el reflejo de la luna en la laguna. Yo miré como ésta se reflejaba en sus ojos.
-No lo sé Iván, y ese es el punto, no sé casi nada acerca de ti- Él suspiró, y miró mis ojos. Mi corazón dio un brinco al ver lo profundos que estos eran. Miré la hora en mi celular, ya eran las 3 de la mañana. “Qué rápido” pensé.

-Creo que iré a ver si ya nos vamos – dije incorporándome, y rompiendo la conexión que nuestros ojos habían hecho. Él se quedo ahí mismo.
-Gracias por venir.
-Gracias por invitar – me di vuelta, y me dirigí hasta la casona.

Busqué a las chicas, y a la primera que vi fue a Tania que estaba conversando con un grupo de chicos animadamente, así que comencé a debatirme en ir o no a interrumpir, en eso sentí que me llamaban la atención y era Charles que estaba sentado en un sillón junto a Mandy. Me acerqué a ellos y me senté al lado de mi amiga.

-¿Qué pasó Sofía?, pareces asustada – me preguntó ella. Se notaba que había bebido bastante.  
- No nada, creo que me mareé. – dije mientras echaba la cabeza hacia atrás.
-¿Quieres que nos vayamos? – preguntó Charles. Miré a Tania que estaba muy divertida, y a ellos que al parecer tampoco lo estaban pasando mal.
-No, claro que no, creo que iré a buscar un trago – intenté sonreír. Me paré y fui a la mesa de bebidas.

¿Por qué conversar con Iván me había dejado tan…rara?, sólo al recordar su rostro cuando le dije que “no quiero ser una más de tu colección”, me daba como una punzada en el corazón, sin embargo estaba bien que lo hubiera detenido, yo no quería sentir nada por él, ni por nadie, y un beso empeoraría las cosas, además seguramente el estaba un poco tomado, por lo tanto mañana no se acordaría de nada. Quería también olvidar todo, así que tomé de un trago una de las bebidas que me pareció que eran más fuertes. Y el mundo me dio vueltas, sabia delicioso, así que tomé otro. “¡Idiota qué haces!” me regañó mi mente. “Pareces la mente de una abuela”, me quejé. Me sentía más feliz, y veía todo más… ¿chistoso? Me tomé otro trago, esta vez más lentamente, disfrutando del sabor.

-¿Qué es? – le pregunté a uno de los chicos de mi clase (creo que el que se sentaba conmigo en geografía).
- Vodka – me dijo él de lo más divertido, creo que ya se había tomado 3 vasos - ¿Salud? –dijo alzando su vaso.
- Salud- me reí, no sé de qué.

Hablamos un rato entre risas, ¡No entendía de qué me reía!, pero era de lo más gracioso ver como se movía la gente, y ver el movimiento del licor en mi vaso. Creo que me tomé 5 vasos, no estaba segura, pero ¡Se me terminaban tan rápido!, Comencé a sospechar de una chica que estaba a mi lado, así que me alejé un poco. Conversé con mucha gente, ¡eran todos tan divertidos! Creo que el chico de geografía se llamaba, Moe o Joe, ya ni me acuerdo, era muy simpático, también me uní al grupo en donde estaba Tania, y ella al parecer también tenía unas copas de más encima, Tom se veía bastante sobrio, pero igual se unía a la conversación fácilmente, no sé que hablaban, pero yo sólo me reía.

-¿Quién quiere más? – dijo la chica ladrona.
- Jajaja, yo, jajaja- ella repartió los vasos a todos. Iba a dar el primer sorbo, cuando sentí que me quitaban el vaso de las manos. – ¡Pero qué…!
- Creo que ya has bebido suficiente – Iván dejó el vaso en la mesa.
- ¿Quién te crees tú, mi mamá? – no sé como dije eso, pero una tristeza me dominó todo el cuerpo, y fui tambaleándome hacia no sé donde, y unos brazos me guiaron hasta un lugar blanco, ¿El baño? Lo miré mientras lágrimas caían por mis mejillas, y enseguida entendí por qué me había llevado hasta el baño. Sentí que mi estomago se retorció y… No creo que sea necesario dar detalles. Él me tomo el cabello hacia atrás.

-¡Te podrías ir! – Le grité como pude – puedo hacer esto sol…

No pude seguir hablando, ya entenderán por qué. Cuando terminé, creo que él me ayudó a pararme, y llegar hasta el lavamanos. Luego me senté en el suelo apoyando mi cabeza en la pared. Aún tenía pena, y rabia. Maldito alcohol, pensaba. Me limpié las lágrimas con el antebrazo, aunque fue inútil, ya que seguían saliendo descontroladas. Iván me tomó el rostro con ambas manos, y con sus pulgares, comenzó a apartar las lágrimas. Tenía frío, y su tacto cálido era relajante.

-Perdón – dije avergonzada- Perdón, perdón.
-Da igual – dijo mientras me abrazaba, y frotaba mis brazos para hacerme entrar en calor.
- Es que, es mamá, ella, ella – tartamudeé – se fue, y lo peor es que cambió a papá, y yo la quería… ella – no sabía si lo que decía tenía sentido, tampoco sabía qué estaba diciendo, las palabras salieron solas de mi boca. Iván se quedo en la misma posición, y siguió con su trabajo de apartar las lágrimas que ahora volvían a salir.
- Tranquila Sofía, todo estará bien – dijo en un tono calmado.
- Ese es el problema- le grité- las cosas nunca están bien, siempre llega algo que  manda todo a la mierda – dije tratando de esquivar los “hip” que me causaba el llanto.

Él no dijo nada, me abrazó más fuerte y comenzó a cantar algo, que me tranquilizó, y sin previo aviso, me dormí.

Los sonidos se sentían muy cerca y retumbaban en mi cabeza, parecía una bomba de tiempo que en cualquier momento explotaría. Me la tomé con ambas manos haciendo presión en las sienes, abrí los ojos y me descubrí en una pieza que desconocía. Me senté en la cama, que era de dos plazas, y el dolor de cabeza aumentó. Miré a mi alrededor, una gran ventana dejaba ver un gran patio, y a lo lejos una lagunilla. Esperen ¿Qué hacía yo aún en la casa de Iván? Intenté recordar qué había pasado anoche, y ¡diablos! No recordaba casi nada, todo se veía como un montón de imágenes borrosas. No quise insistir en mi inspección de recuerdos, puesto que el dolor de cabeza aumentaba. Decidí que sería mejor ver en qué estado estaban los demás, porque no creía que me hubieran dejado en la casa sola. Al levantarme noté que seguía con mi vestido, ¡Alabado sea Dios!, no me hubiera perdonado haber hecho algo indebido bajo los efectos del alcohol. Salí de la habitación y me encontré con un gran corredor, con tres puertas a cada lado. Quizás todas las habitaciones eran igual de grandes. Fui hacia el lado en donde se veían unas escaleras al final. Y luego las bajé como pude. Vi que la sala estaba más o menos limpia, supuse que habían logrado quitar gran parte de la basura. El ruido de voces y risas venía de una puerta al costado derecho. Al entrar, vi que estaban Tania, Amanda, Charles, Iván y uno de sus amigos. Me di cuenta que Tania estaba igual que yo, con unas grandes ojeras y al parecer también con dolor de cabeza.

-Hola dormilona – saludaron todos menos Tania, que al parecer estaba muy concentrada en cómo sacarse el dolor de cabeza.
- Hola – dije con voz de ultratumba, me senté al lado de Iván que era el único asiento libre – Charles por qué no nos fuimos a casa – pregunté cuando me libré de las bromas de los demás.
- Porque no estaba en las condiciones de manejar – se sonrojó – bueno, ninguno de nosotros, e Iván me ofreció que nos quedáramos acá, ya que tú y Tania se habían dormido ya – ambas nos sonrojamos a no poder más.
- Oh, ok – dije aún con las mejillas hirviendo.
- ¿Quieres algo para comer? – me preguntó amablemente Iván.
-No gracias – dije tomándome la cabeza, al parecer él no me escuchó, o simplemente me ignoró, puesto que me puso una pastilla y un vaso de leche en frente.
-Te ayudará – dijo apuntando la pastilla. Me la tomé e intenté tomarme la leche sin que se me revolviera el estómago. Me pregunté si Charles no estaba en “condiciones” de manejar, por qué se veía tan bien, y supuse que se trataba de la experiencia.

Estuvieron un rato conversando de cosas sin importancia, y yo rogaba con toda mi alma que se callaran, pero parece que mis deseos no eran posibles, porque al parecer estaban muy animados hablando. Luego Charles le ofreció o más bien “insistió” a Iván ayudarle a limpiar el resto de la casa, y aunque yo no quería igual participé en la sesión de limpieza porque pensé que era lo correcto. Me ofrecí a limpiar el patio ya que necesitaba aire fresco. Al salir, me encontré con que estaba mucho peor de lo que se veía en la noche. Tomé una bolsa de basura, y comencé a recoger botellas, vasos, colillas de cigarros, más botellas, más vasos y otras cosas que eran simplemente curiosas.

-Creo que necesitarás ayuda para limpiar todo esto – dijo con una mueca divertida Iván, mientras tomaba otra bolsa y hacía lo mismo que yo.

Limpiamos bastante rato, hasta que todo quedo decente. Intenté nuevamente recordar lo que había pasado anoche, alcohol, baño, risas, llanto, y todo me llevo a que estaba completamente avergonzada de que él me hubiera visto así.

-Ehh, oye… - comencé a decir, él me miró curioso – este… lo siento, fue una total idiotez tomar tanto anoche, y pues… lamento que me hayas visto así – dije con las mejillas ardiendo y mordiéndome el labio inferior.
-Sí, lo fue – tocó suavemente mi labio, de modo que lo solté – te lo romperás – comentó con una sonrisa – y la verdad, es que da igual, mientras no se vuelva en un hábito que te emborraches - Asentí, y bajé la cabeza, la verdad es que me daba mucha vergüenza, no importa lo que él dijera. – Te ves increíblemente tierna cuando te sonrojas – sonrió.
- Ehh, supongo que… gracias – le creí, por muy cliché que su comentario sonara, en sus labios parecía verdadero.
-¿Sofía? – sentí que me llamaba Tania, me alejé de Iván puesto que nuestra distancia daba para pensar cualquier cosa. – Oh siento interrumpir – dijo aguantando una carcajada – es que… Mandy está como loca, ya que no sabe si sus papás habrán llegado a su casa, será mejor que nos vayamos. Te espero adentro- y me guiñó un ojo. Sentí que Iván se reía.
- ¿Qué te parece tan chistoso?, ahora tendrá motivos para molestarme todo el camino a casa – dije frustrada.
- ¿Tan malo es que te molesten conmigo? – dijo en un tono ofendido. Yo negué.
- Mejor me voy, no quiero que se arme un escándalo en la casa de Mandy, gracias por todo.
- No agradezcas tanto – me dedicó una sonrisa torcida, y ambos fuimos a la casa. Como Tania había dicho Amanda estaba hecha un manojo de nervios, y Charles trataba de tranquilizarla. Nos despedimos del amigo de Iván, que se llamaba Pablo, y de él por supuesto.

Cuando ya íbamos en el auto Tania comenzó a hacerme mil y una preguntas acerca de yo y de Iván.

-Primero, no viste nada anoche porque estabas igual de borracha que yo – Amanda y Charles estallaron en risotadas, y Tania cruzó sus brazos – y segundo, tampoco viste nada en el patio, porque no paso nada – exclamé.
- Pero estaban tan juntos, huy hacen muy linda pareja – dijo aplaudiendo.
- Claro que no – fruncí el ceño.
- Si y si – me sacó la lengua, y yo imité su gesto.

Ella sonrió satisfecha de que yo me hubiera quedado callada, pero no sacaba nada con discutir con Tania, siempre ganaba. Las tres íbamos cruzando los dedos, para que los padres de Mandy no se les hubiera ocurrido pasar por la habitación de ella.

-Y cómo se supone que entraremos – pregunté confundida.
- Por la ventana – dijo Tania- así como en las películas – yo rodé mis ojos.
- Si, gran genio, pero la habitación está en el segundo piso.
- Oh.
- Quizás le podemos pedir a Marta (la señora que trabaja en la casa de Amanda), que nos ayude a entrar – comentó Mandy.
- ¡Sí! – exclamamos las dos.
- Y tú Charles, ni una palabra de esto a papá – le advertí – si no aquí correrá tu sangre y la mía.
- Ok, jefa, tampoco pensaba hacerlo, idiota no soy.

Al llegar a casa de Amanda, nos despedimos de Charles, y nos escabullimos por la cocina, y le pedimos a Marta que nos dijera si el camino estaba libre. Y al parecer los padres de Mandy no se habían dado cuenta de nuestra ausencia. Al llegar a la pieza de ella, por fin pudimos respirar en paz. O eso pensé yo...

Aquí les dejo el cap ^^, gracias a las que leen, a las que me siguen , y a las que comentan :D! Me alegran el día chic@s , bueno espero les guste. Se cuidan.




4 comentarios:

  1. Uii...o eso pensaba yo no me ha gustadoo jaja xD
    Ya estoy a la espera de otro capítuloo e.ê :)
    Besoos!

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  2. wow simplemente genial! espero que publiques pronto el siguiente.

    chao y besos!!!

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  3. Hola!!! aqui pasandome por tu blog...!!!
    estoy muy contenta de que hayas decidido empezar una historia...!!!!

    es a veces un tanto dificil llevar a cabo los capitulo... yo lo se pqee llevo mas tiempo qe tu cn mi blog y solo he podido publicar un capitulo...!!
    por eso estoy muy encantada de que vayas muy bn cn tu historia..!!
    de vdd esta super genial..!!
    ya tambn ya espero cn ansias el proximo cap..!!
    bsos

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  4. Holaa!! Te hice caso y me pase x tu blog!! xD La historia esta genial (me he hecho seguidra =) ) Tiene algo que me llama la atencion xDD Ademas, adoro la pareja que acen Sofia y Ivan +.+

    Bueno, publica pronto.

    PS: Conozco a la chica que hace de Sofia, y no has podido elegir mejor xD

    XoXo

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